ALAN ALARCÓN | Si he de morir de hambre, que sea en un escenario | EDUI TIJERINA | Diciembre 2024

Cuando el destino nos alcance | LUGI GOGA | Mayo 2020

Por: Lugi Goga
Fotografía: Especial

Cuando el destino nos alcance…: Especial

La Inteligencia Artificial es sin duda una herramienta que nos puede ayudar a acortar tiempos y aumentar la eficiencia de nuestras tareas, pero es nuestra responsabilidad limitar y decidír hasta donde es eticamente correcto hacerlo.

Durante esta cuarentena, nos hemos dado cuenta de muchas actividades que antes no valorábamos, así como de otras que ni siquiera habíamos percibido. Lo que sí es un hecho, es que hemos cambiado nuestra forma de vivir y nos hemos tenido que acoplar a estas nuevas circunstancias. Dentro de lo positivo, es que el aire está más limpio de contaminación que de costumbre, se escuchan cada vez más pájaros, inclusive se dejan ver algunas especies de mamíferos a las afueras de la ciudad, como es el caso de osos y lobos.

Debemos también mencionar, que hemos tenido que reinventarnos a través de nuevas actividades y de estar ajustándonos a laborar de manera virtual.

Ese proceso de adaptación, de prueba y error, es el que nos está haciendo innovar en el uso más eficiente de nuestras herramientas, creando a su vez necesidades antes no vistas, donde la tecnología cobra consciente e inconsientemente, más importancia en nuestra vida diaria.

El uso de nuevas aplicaciones y herramientas, están dándole cada vez más importancia a la Inteligencia Artificial, ayudando en la logística y cálculos para poder obtener lo que necesitamos de una manera más rápida. Tan simple como solicitar y recibir un artículo a través de una plataforma digital, o como pedir comida rápida con entrega a domicilio por medio de drones, o inclusive como solicitar un taxi con auto-conductor, entre otras cosas.

La Inteligencia Artificial es sin duda una herramienta que nos puede ayudar en acortar tiempos y a aumentar la eficiencia de nuestras tareas. Lo importante aquí es determinar hasta dónde es ético y correcto delegar tareas a estos complejos robots, analizando las actividades que no pongan en riesgo de algún modo la seguridad, sustentabilidad y la vida misma del ser humano. Pareciera lo anterior una película de ciencia ficción, pero hoy en día ya existen muchas de las cosas que hemos visto en filmes futuristas.

Ahora les pregunto: ¿Y cuando el destino nos alcance? Algo que muchos inconscientemente nos hemos preguntado y que se refiere a cuando la humanidad deje de ser quien lleve el mando de las máquinas y éstas empiecen a tomar decisiones riesgosas y trascenendentales por si mismas. Es por eso que siempre deberemos llevar la delantera ante una situación como ésta, respetando protocolos de seguridad y estableciendo límites. No podemos poner nuestra forma de vida humana, en manos de una entidad artificial que carece de sentimientos, espíritu y alma.

Nuestro destino es el que vamos creando cada día. Debemos establecer vínculos muy estrechos con la comunidad donde vivimos, no dejar de tener comunicación con ella, estar al pendiente y apoyar a nuestros semejantes. Es importante también crear un engrane armonioso donde podamos vivir y convivir como una sóla sociedad. 

Elevemos nuestro espíritu hacia una conciencia colectiva donde estemos todos unidos sin la necesidad de ningún aparato, simplemente abriendo nuestro corazón, siendo coherentes y asumiendo las responsabilidades que nos toque realizar con nuestros semejantes.

Luis González “Lugi Goga” 
ing.luis.gonzalez.g@gmail.com 

Graduado de Ingeniería Civil con especialidad en Desarrollo e Innovación Empresarial en el ITESM. Ha participado en diferentes proyectos de edificación vertical con base en ingenierías de valor y optimación de procesos.