ALAN ALARCÓN | Si he de morir de hambre, que sea en un escenario | EDUI TIJERINA | Diciembre 2024

Lo que fue en 2020 es nuestro daño | IRMA IDALIA CERDA | Junio 2020

Por: Irma Idalia Cerda
Fotografía: Especial


Lo que fue en 2020 es nuestro daño

El coronavirus es un mal que ha afectado a todo el mundo y aunque en otras circunstancias estamos divididos por ideologías, idioma y cultura, esta desfavorable situación nos une y nos hermana.

Hay un refrán popular que dice que “Lo que no fue en tu año, que no te haga daño”, para dar a entender que si pasó algo malo, pero tú no estabas ahí, entonces no debe afectarte, pero luego me quedé pensando que si ese dicho aplicara para el 2020, este sí sería un año que ha sido el “daño” de todos y ya saben a qué me refiero.

El coronavirus es un mal que ha afectado a todo el mundo y aunque en otras circunstancias estamos divididos por ideologías, idioma y cultura, esta desfavorable situación nos une y nos hermana.

Hemos visto como en China, donde empezó el brote, la gente sufrió los estragos del COVID-19 que ha cobrado innumerables muertes, pero en ese momento aún el resto de la humanidad no tomaba conciencia de lo que ocurriría en sus propios territorios.

Pero aquí el problema es que han surgido muchas dudas y hasta “conspiraciones” relacionadas con esta pandemia que ha puesto en cuarentena a millones de habitantes de todo el planeta, que viven con la angustia de pensar si les tocará contagiarse al salir de su casa, ya sea al ir trabajar o a conseguir víveres.

Sólo un sector de la población actúa como si no pasara nada. Es más, parece que apuestan a ganar cuando tienen todas las de perder, porque no usan tapa bocas, van a la playa, a bares o bien, hacen reuniones en sus casas.

Y como no pueden ir a conciertos y espectáculos masivos, ni apoyar a su equipo en un partido de futbol, porque los suspendieron, ellos de todas maneras no acatan las medidas de prevención para evitar la propagación del virus.

Al menos en México ya pasaron dos meses de confinamiento o “confi” como le llaman coloquialmente, y como para no variar, hay opiniones encontradas sobre qué hacer y qué no hacer, porque a las autoridades como que ya no les creemos mucho.

Y es que hay cosas que no podemos dejar de observar como el hecho de que no dejan a dos personas en un mismo vehículo, pero si a un montón de gente en el transporte público, así como muchos restaurantes tuvieron que cerrar, pero en otros sí hay hasta servicio con mesas separadas; en fin, son irregularidades muy obvias.

Entonces, algunos, digamos la gran mayoría, tratamos de seguir resistiendo, permaneciendo en casa el más tiempo posible, y sólo salimos a hacer el mandado o si se presenta alguna emergencia, como cuando se incendió el negocio de al lado de mi casa, por citar un ejemplo.

Y tratamos de mantener la calma, seguir trabajando desde casa -los que podemos- y vemos la manera de poder seguir lidiando con esta situación, pero de prolongarse más tiempo, tengo la impresión de que sucederán algunos eventos no muy afortunados.

Ojalá me equivoque y la cuarentena llegue a feliz término en Agosto, Septiembre, Octubre… porque como bien dice otro conocido refrán “no hay mal que dure cien años, ni enfermo que lo resista”. 

irma_idalia@hotmail.com