- Obtener vínculo
- X
- Correo electrónico
- Otras apps
- Obtener vínculo
- X
- Correo electrónico
- Otras apps
Atrapados en una realidad “material”
Uno de los hallazgos más importantes que se han descubierto en los últimos años referente a nuestros ancestros, es que nuestra raza humana fue intervenida genéticamente por seres más avanzados.
Hoy en día estamos viviendo una era muy importante, ya que están despertando muchas conciencias de seres humanos que estaban dormidas súpitamente en un sueño de muchos siglos. La realidad que estamos experimentando, está llena de enigmas, lugares mágicos, secretos ancestrales y temas que poca gente conoce.
Uno de ellos fue el que modificó y desvío la línea de tiempo
de nuestros antepasados. Fue
la gran intervención a la que
fuimos sometidos hace más
de 10,000 años. Se dice que
fue por seres de civilizaciones
más avanzadas, pero no precisamente del espacio exterior,
sino que pudieron haber sido
civilizaciones que ya radicaban
en este mundo y que estuvieron paralelamente viviendo con
nosotros, pero en áreas recónditas y de poca accesibilidad.
En las civilizaciones antiguas, se realizaron construcciones de gran impacto, similar
a como sucedió más adelante
con la cultura egipcia, donde
se edificaron monumentos
que actualmente podemos
visitar y admirar. Investigadores del tema han llegado a la
conclusión de que esas obras
maestras fueron realizadas con
ayuda de seres más avanzados.
Incluso existe evidencia del
grado de exactitud tecnológico
que tenían en ese entonces, lo
cual se puede apreciar en la
colocación y corte de las piedras que forman parte de sus
edificaciones.
Actualmente con nuestra
tecnología, sería muy difícil
llegar a esa precisión y poder
levantar esos bloques tan
pesados a decenas de metros
de altura. No cabe duda, que
definitivamente fuimos asistidos por seres más avanzados.
Gracias a los últimos
descubrimientos realizados utilizando escaneos con
ultrasonido, ya sabemos que
en varias partes del mundo
existen monumentos que aún
no han sido rescatados y que
se encuentran aun en mares
o selvas.
Uno de los hallazgos más
importantes que se han descubierto en los últimos años
referente a nuestros ancestros,
es que nuestra raza humana
fue intervenida genéticamente
por seres más avanzados, con
el propósito de manipularla
para dominar la faz de la tierra.
Esa intervención consistió en
la inclusión de un código genético en nuestro ADN, el cual
realiza ciertas operaciones
inconscientes y nos hace crear
una realidad que nos aleja de
la conciencia absoluta.
En otras palabras, nos
manipularon para que nosotros viéramos las cosas como
ellos querían de las viéramos.
Ese código genético nos hizo
creer que somos independientes y que podemos sobrevivir
sin la necesidad de una interacción con alguien y de creer
que nosotros somos un “ego”
el cual tiene como fin, satisfacer continuamente sus deseos
de tener más, de ser más y de
no importarnos los demás.
Un sentimiento que nos hace
completamente materialistas
de una materia ilusoria, ya que
todo es energía y por consiguiente nos hace creer en algo
que simplemente no existe,
siendo la conciencia absoluta y
nuestras experiencias lo único
presente.
Un ejemplo muy representativo, son las grandes obras
de arte, que no son más que
una manifestación de una
persona conectada a la conciencia absoluta. Esto debido
a que estás ligado a esa inteligencia todo fluye, queriendo
decir que nosotros somos un
instrumento para crear una
expresión. Es por eso que
cuando un artista deja fluir
lo que siente, deja también
plasmados sus sentimientos
y percepción en su obra. En
otras palabras, es como si
fuera una esponja que absorbe
todo a su alrededor y lo deja
plasmado a la realidad con su
arte; convirtiéndose a su vez
en experiencias que se quedan
grabadas en la gran nube de la
conciencia absoluta.
Sin embargo, debido a la
intervención que he comentado anteriormente, nos volvimos una raza competitiva,
seres que deseamos tener
muchas cosas materiales, que
nos han hecho olvidar nuestro
verdadero propósito y función
en este planeta.
Necesitamos ir desactivando
lo que tenga que ver con nuestro “ego”, aunque de antemano
sepamos que éste solamente
pueda ser controlado y no eliminado por completo debido a
que es parte de nuestro ADN.
¿Pero cómo controlarlo? Creyendo en nosotros mismos,
buscando lo que realmente
nos gusta y llena, meditando
todos los días, dando gracias
por todo lo que tenemos y evitando emitir críticas.
Tenemos que tener cuidado
de la contraparte, representada por el caos y la oscuridad,
conceptos que siempre estarán
creándote dudas y conflictos y
que se encuentran enlazados a
tu inconsciente. Se pudiera
decir que nos metieron miedo,
un miedo que nos aleja de lo
que realmente queremos y de
la conciencia absoluta que es
Dios. Sin embargo, el miedo
no existe, nosotros mismos lo
creamos con nuestros pensamientos. Es por eso que las
decisiones que tomes en la vida
deberán ser no con tu mente,
sino con el corazón, logrando
así una conexión directa con
Dios.
ing.luis.gonzalez.g@gmail.com
Ingeniero Civil con especialidad
en Desarrollo e Innovación
Empresarial por el ITESM. Ha
participado en diferentes
proyectos con base en
ingenierías de valor y optimación
de procesos.
- Obtener vínculo
- X
- Correo electrónico
- Otras apps