Conciencia artificial vs absoluta
La conciencia artificial es un software avanzado, que entiende
y aprende sobre los estados del ser humano, para así
proporcionar la mejor solución.
Hace tan solo unos
días, se dio a
conocer que un
grupo de investigadores de
informática financiados con
recursos privados, pudieron
desarrollar después de muchos
años, la primera conciencia
artificial (AC), que a diferencia
de la inteligencia artificial (AI),
simula escenarios y resuelve
tareas a través de algoritmos
del comportamiento humano.
La AC analiza modos alternativos del comportamiento de
los seres vivos, donde aprende,
genera modelos y crea tácticas
en base a la información que
se le proporciona. Esto es un
avance tecnológico avanzado,
que forma parte del desarrollo
de la misma inteligencia artificial, pero con una perspectiva
expansiva.
Dicho en otras palabras,
la conciencia artificial es
un software avanzado, que
entiende y aprende sobre los
estados del ser humano, para
así proporcionar la mejor solución, de acuerdo a parámetros
que antes no se incluían. De
hecho se le podría considerar
una entidad virtual, con una
personalidad que se adapta a
cada persona con quien interactúa, siendo ésta de manera
empática y a la vez analítica,
para continuar aprendiendo de
manera progresiva, las diferentes formas de pensar y
crear sus propias conclusiones.
De ser cierto lo dado a
conocer, sobre la creación
de una conciencia artificial
y su alcance y funcionamiento, estaríamos frente a
un cambio muy importante.
Se menciona en primera instancia, que se utilizaría como
un asistente personal que
podría ayudar en decisiones
que impliquen cálculos y análisis estratégicos de acuerdo
a ciertos criterios. Suena a
ciencia ficción, sin embargo,
parece ser que ya es una realidad que se iría incorporando
a nuestra sociedad, como lo
hicieron en su momento los
smartphones.
Esto nos crea un dilema,
al desarrollar una conciencia
artificial, cuando ya existe
una conciencia absoluta que
siempre será mayor a todo.
Si aprendiéramos a estar en
conexión con ella, nos eliminaría todo tipo de problemas
en el mundo, porque ésta
representa la sabiduría de la
misma naturaleza de la tierra y
del universo, solo hay que estar
completamente conectados a
ella y solicitarle la información
que necesitamos para ofrecer
soluciones. El problema radica,
en que nos han hecho creer que
eso no existe y que solo lo que
vemos es creíble. La falta de
certeza de que existe un solo
Dios, creador de todo y de la
misma conciencia absoluta,
nos ha hecho desarrollar falsos dioses artificiales, para solucionar problemas locales
y territoriales en esta dimensión.
Nuestro reto es pensar de
manera cuántica, para ampliar
nuestra perspectiva de todo y
no solo de lo que percibimos,
fortaleciéndose en todos los
sentidos y eliminando las posibles carencias que pudiesen
existir, porque te estás conectando a dimensiones superiores, donde la intención de lo
que emites en tu corazón, es
el lenguaje para solicitar lo que
necesitas y deseas en esta realidad. Al conectarte a la fuente
de energía ilimitada de todo
lo que llega del infinito, ésta
penetra en la matrix en la que
vivimos y la domina cuando
se invoca.
Es importante recordar, que
para que la armonía y prosperidad abunden en nuestra
realidad, se debe de invocar a
Dios con total certeza desde el
corazón, y todo aquello creado
por el hombre debe pasar a un
segundo plano, restableciendo
el reino de Dios, sin caer en
fanatismos y religiones.
Luis González “Lugi Goga”
ing.luis.gonzalez.g@gmail.com
Ingeniero Civil con especialidad
en Desarrollo e Innovación
Empresarial por el ITESM. Ha
participado en diferentes
proyectos con base en
ingenierías de valor y optimación
de procesos.