Por: Miguel Ángel Arritola
Fotografía: Miguel Ángel Arritola
JOSÉ GÓMEZ
Un pintor creativo y sensible
El artista peruano
expondrá a partir de este
jueves 25 de mayo su obra
“Espacio apropiado”, un
conjunto de piezas que
estarán en “Cárcamo
Galería”
Con la exposición “Espacio apropiado” que
se inaugura este 25 de mayo en Cárcamo
Galería, el pintor peruano Héctor Gómez
quiere que todos los regiomontanos conozcan su arte.
El artista, quien tiene más de 20 años en el oficio,
señaló que, en un viaje realizado por Denise Cárcamo,
(dueño de la galería) a Lima Perú, fue que surgió la
invitación para exponer en Monterrey.
“Espacio apropiado” es un compendió de obras
realizadas a lo largo de estos últimos cuatro años”,
expresa Héctor Gómez.
“Dentro de esta exposición hay obras que ya se han
presentado en otros espacios como en Lima, Perú, y como
todo en el arte, son coincidencias el estar ahora acá”.
Gómez asegura que, durante la pandemia, surgió
aún más fuerte el arte de pintar.
“Ya había una urgencia por volver a recuperar los
espacios, por volver a pintar, por volver a viajar. Fueron
dos años que de alguna manera aprendimos mucho”.
El pintor declara que su trabajo está dentro del
paisaje contemporáneo.
“A pesar de ser de Lima, no represento un lugar
específico. Me valgo de los elementos urbanos, para
un poco crear historias de soledad, de acumulación
y las cosas que se ven en el día cotidiano”.
¿Cuáles son los elementos que utilizas para
plasmar en tus pinturas?
“Los elementos que uso son muchas veces objetos
como bicicletas, sillas y por ejemplo, actos humanos
que se acumulan, como los días de playa en el verano
en “x” sitio, personajes que tengan una historia,
tengo una serie de trabajos de los maestros del arte
universal que también los vuelco en mis obras”.
Es la quinta vez que viene a México y la primera vez
que expone en Monterrey.
“En los días que he estado en Monterrey, me han
dicho que la gente de acá les gusta mucho el arte y
lo estoy comprobando día a día”.
“Espacio apropiado” está conformado por 20 óleos de
formatos diversos, algunos grandes de 2 metros por
1.50 y otras obras 12 obras más pequeñas, en papel,
entonces yo creo que en total serán unas 25 piezas en
total la que se expondrán esta noche del 25 de mayo
en la Galería Cárcamo”.
¿Cuáles tu percepción del arte que has visto en
Nuevo León?
“Bueno, he visto muy poco y lo poco que he visto lo he
seguido por revistas. Pero lo que si veo es que hay mucha
influencia por la cercanía con los Estados Unidos, de
hecho, la misma ciudad tiene ese carácter, esa forma
que evoca mucho a Los Ángeles, incluso a Miami, por
ende, el arte que estoy viendo tiene un poco ese matiz,
pero con el color propio de México, un país rico en
cultura y en color”.
¿Qué es lo que te llevarías de Monterrey a Lima,
Perú?
“Toda su belleza. Me gusta lo ecléctico, en cierta
forma siempre he pensado que es una bendición y
maldición a la vez el estar cerca de este monstruo
gigantesco, (EU), pero ayuda a tener orgullo nacional,
a trabajar duro por lo que se hace y estar a la par de
este monstruo poderoso, eso sí, se ve pujanza, de por
si el mexicano es gente muy trabajadora, y se nota
ese orgullo de lo nacional y de sobresalir, eso es lo
que me llevo, ese el ejemplo que tenemos en América
Latina, que tenemos que seguir, no quedarnos con el
problema porque en todo caso, que el problema sea
el motivo para salir adelante”.
¿Cuándo surge esa alma de artista?
“Wow, me recuerda mucho esa pregunta a Giorgio
Vasari cuando le escribe al joven Leonardo da Vinci
cuando este joven, a los 14 años de edad, entra al taller
de Verrocchio a aprender a dibujar cabezas, y telas,
no dijo “vas a ser artista”, no, eso es una cosa que se
da con el tiempo, primeramente, hay que formarse,
hay que entrar con humildad, como un aprendiz a
eso, a moler los colores, a preparar las telas, a saber
usar las herramientas básicas de este noble oficio de
tantos siglos. Una vez que eso se da, porque aparte
nunca se deja de aprender, puede o no darse esa chispa
de lo que se llama arte y creación”.
¿Te consideras un artista?
“Yo al principio me consideré un pintor, porque
para mí el pintar es de tal nobleza, de tal complejidad que el intentar llegar a pintar algo bien,
ya es mucho, se lo dejo al público, a la gente y a
la crítica que pueda definir eso como arte o no.
Intento, humildemente, acercarme a ese ideal. Pero
si siento que está esquivo”.
¿Hay algo que te impulse a pintar?
“Esa es mu buena pregunta. Cuando leía a mi paisano Vargas Llosa, cuando recibe el nobel y él dice
que cada día él escribe como 100 páginas y en las
noches descarta la mayoría y se queda sólo con la
esencia, así es el arte, se hace haciendo, yo trabajo
todo el tiempo, tenga exhibición o no, tenga viajes
o no. Tengo caballetes en Nueva York, en Barcelona,
y cuando viajo agarro mis cosas, soy mucho de ir al
campo, la naturaleza y la vida me siguen como un
punto de referencia. Hay dos formas generales de
creación; el motivo que es lo que representamos,
lo podemos tener dentro, y otros que tenemos que
partir del motivo exterior.